He tenido la oportunidad de compartir con algunas personas en este caminar misionero por Africa que me han dicho: "hermana, esta es la otra cara de la Iglesia" pues al quedarse con nosotras unos dias en la misión se empapan un poco acerca de la labor que realizamos.
Así como nosotras Misioneras de Santa Teresita, hay muchos hombres y mujeres arriesgados que han decidido libremente servir al Señor desde un servicio alegre y generoso a sus hermanas y hermanos en tierras difíciles de misión, con grandes retos como son el aprendizaje de la lengua local, la inculturación, el primer anuncio y con algunas carencias como el agua, la energía, los medios de comunicación. Sinembargo son felices y dan lo mejor de sí mismos para llevar a cabo el plan de Dios.
Mi sincera gratitud a todos ellos hermanos misioneros que entendieron que nuestra misión es dar a conocer la persona de Jesús y su mensaje de amor, paz, solidaridad, justicia, desde un testimonio creíble de discípulos y misioneros del Señor.
Muchas veces juzgamos sin conocer a fondo algunas realidades. Amemos nuestra Iglesia Católica, detengamonos a conocer toda la maravillosa labor que realiza en el mundo por medio de diferentes acciones lideradas por Consagrados, Sacerdotes, Laicos Misioneros, Voluntarios que han entendido que necesitamos "AMAR Y SERVIR" a los demás y que la verdadera felicidad consiste en hacer felices a los demás.
Mis mejores deseos para todos. Dios los bendiga.
NO es la otra cara, es la "verdadera" cara de la Iglesia. Un abrazo: Joan Josep
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